martes, 22 de febrero de 2011

del Amor y Otros Chamuyos

[Sé que por la línea editorial de este blog esta entrada puede sonar un poco ñoña al principio, careta quizás. Pero todo tiene un por qué y espero que lean toooodo el post para entender.]

Para los que me vienen leyendo desde hace tiempo y/o los que me conocen saben que soy bastante anti-San Valentin o pro-San PéguenseUnTiro. Pero este festejo yanqui que se viene instalando desde hace varios años y cada vez se propaga más, peor que la Gripe A en su momento(de hecho, muchos le tienen el mismo miedo!), hace que de solteros anti-sistema veamos cualquier oportunidad para festejarlo y poder sentirnos parte.
Ya sé qué estás pensando, pero no me vendí! Siempre fui sincero y esto es lo que me está pasando. Hace muy poco descubrí que no soy anti amor, ni insensible, sino que soy anti cliché. Lo trillado es lo que me causa rechazo, me suena artificial, muy prefabricado para mi gusto. Prefiero las cosas dichas con palabras propias y las personas auténticas. El chamuyero a mí me da a mentiroso, me enferma conocer cada palabra que dicen, siento como si estuviera escuchando el guión de una telenovela mexicana en vez de estar hablando con alguien. Pero, aunque el chamuyero muchas veces nos agarra de sorpresa y con la guardia baja, aunque sea una pizca de sospecha nos da previamente; sabemos cuando tomarnos ciertas cosas(y a ciertas personas) con pinzas.
Escuchamos canciones de amor desde que somos adolescentes y en algún momento la tentación nos gana y nos queremos sentir como describen las letras románticas. Tal vez por las hormonas, el destino o vaya uno a saber por qué cada tanto está bueno animarse a dejar los prejuicios y las reglas de lado para poder dejarse llevar. Ese espacio te lo tiene que dar otra persona para creer que todavía hay gente que vale la pena. Se siente genial retomar esa forma libre de andar por la vida, aún sin miedo a los riesgos que hay afuera ni a exponerse al 100% sin preocuparse por cómo se lo tomarán del otro lado, como cuando eramos inocentes antes de que nos rompieran el corazón tantas veces.
Es difícil eliminar los hábitos, sobre todo los malos, pero nunca es tarde para permitirse estar bien. El tiempo parece volar cuando te encontrás en la misma sintonía con alguien más, y nada parece ser demasiado rápido, lo correcto es lo que se siente y si es consensuado no quedan dudas de eso.
Cuando todo lo demás no funcionó ni era lo que querías, de repente encontrarte en un lugar nuevo y desconocido parece un buen presagio. Y aunque nos costó, si con el tiempo terminamos aprendiendo a sufrir... ¿qué tan difícil puede ser amar?

martes, 8 de febrero de 2011

el Veran(e)o

[Me desperté a las 4AM, la luna llena se veía imponente desde la ventana hace unas horas. Levanté la persiana pero ya no estaba. Salí a la terraza, no la encontré por ningún lado. El eclipse aún no había comenzado, de todas maneras la luna ya había desaparecido. En la televisión transmitieron el fenómeno en vivo, pero no verlo en persona pierde la gracia. "Será en otra oportunidad" me dije y me descargué con unos tweets y comiendo 1/4 de helado que tenía en el freezer. De esta manera recibí el verano: decepcionado! Y ni me imaginaba cómo este sentimiento se iba a repetir en el siguiente mes...]


Una vez más el tren llegó a la estación más calurosa del año. Nuevamente nos invaden las propagandas de productos light; la mayoría de las mujeres se tornan adictas a la dieta y gran parte de los hombres al gimnasio. Tanto esfuerzo, sudor y lágrimas para mostrar un poco de piel al aire libre por unos días. Para mí no vale la pena. En esta temporada decidí hacerme cargo y aceptar mi cuerpo tal como es: con mis partes flojitas, mis rollitos y mis pelos en los hombros. Suena fuerte, lo sé, pero me terminé de ir al carajo cuando me compré un short tipo boxer ATF(Apto para Toda la Familia, nada de zunguitas gentiles), y lo he usado como uniforme oficial durante todo el día en mis vacaciones. Es como mi militancia a favor de los cuerpos naturales y en contra de Mister Anabólico y Miss Siliconas.
Es un poco contradictorio porque me siguen gustando los chicos musculosos, pero estoy en contra de la gente que no come para no engordar y está pendiente constantemente de su físico. ¿Para qué vinimos a este mundo? Para disfrutar y vivir la vida! No para matarse en un gimnasio para gustarle al resto, no hay que ser infeliz para atraer a las personas. Esta es mi campaña pro-belleza interior y pro-grasas trans.
Pero la realidad es otra y es imposible ir en contra de la corriente! Los medios hace años vienen difundiendo EL modelo de belleza de cómo deben verse las personas: las nuevas tetas son redondas, así es nena, con las que naciste ya no te sirven porque ahora sólo son atractivas las que salen del quirófano, son las únicas que se ven en la televisión y las revistas, viste? Y si no tenés los abdominales y todos los músculos marcados y estás depilado no sos nadie, pibe! Si nos guiamos por los medios vamos a creer que los cuerpos naturales se extinguieron y si pensamos que así es como hay que ser, o morimos de la depresión o nos unimos a la dictadura corporal!
El problema es que durante estos tres meses la gente está más caliente y tonta que nunca. Parece que durante las vacaciones todos dejan sus cerebros en casa cargando las baterías.
De todas formas a no desesperar! Ya estamos en febrero, ya se termina el descanso, en unas semanas empiezan las clases y cuando nos queremos acordar, comienzan a caer las primeras hojas del otoño!
Así que a disfrutar de los chicos en cuero por las calles, que todo lo bueno dura poco y se pasa volando...